3 principios esenciales para el diseño de experiencias en eLearning

Hoy en día vemos cambios y crecimientos más rápidos en la manera en la que se crean y se ofrecen experiencias de formación en línea como nunca antes en los últimos años. Con tantos cambios en un margen de tiempo tan corto, la tarea de generar experiencias de aprendizaje significativas puede ser agobiante. Para poder diseñar y ofrecer un aprendizaje que tenga un impacto positivo, es importante reflexionar acerca de cuáles son las mejores prácticas para el aprendizaje y el diseño educativo.

Como parte de la serie de eLearn Success Series presentadas por Open LMS, el diseñador didáctico Mark Parry compartió los que él considera que son los principios más relevantes del diseño para generar experiencias de aprendizaje duraderas y significativas en nuestro mundo que nunca deja de evolucionar.

Mark es un diseñador didáctico galardonado, profesor y productor de contenido digital con más de 30 años de experiencia en la enseñanza, desarrollo de programas, producción de medios digitales y desarrollo profesional para educadores. Actualmente, es diseñador didáctico en la Association of Independent Schools en Nueva Gales del Sur, en Australia.

Un buen diseño didáctico requiere buenos principios de diseño

Las sugerencias de Mark se basan en el trabajo Ten Principles for Good Design del diseñador industrial alemán Dieter Rams, quien dice que un buen diseño:

1. Es innovador

2. Crea un producto útil

3. Es estético

4. Crea un producto fácil de entender

5. Es discreto

6. Es honesto

7. Es duradero

8. Es meticuloso hasta el último detalle

9. Es amigable con el medio ambiente

10. Utiliza la menor cantidad de diseño posible

A pesar de que estos principios se referían originalmente al diseño industrial, Mark los aplica en las experiencias del eLearning y motiva a otros diseñadores didácticos a que hagan lo mismo. Establecer buenos principios de diseño antes de iniciar un proyecto es esencial para crear experiencias significativas para los estudiantes. También es importante tener en cuenta el propósito del aprendizaje, el contexto en el que el aprendizaje tendrá lugar y la pedagogía detrás de las experiencias de aprendizaje. Si bien, los diez principios son valiosos para diseñar grandes experiencias de aprendizaje, aquí hay tres principios que no se pueden pasar por alto.

1. Hacerlo útil para el estudiante

Al momento de hacer cursos de eLearning significativos, la experiencia del usuario final debe ser lo primero en lo que piensen los diseñadores. Según Mark, un buen diseño didáctico y educativo genera una experiencia útil y comprensible para el estudiante. Debe pensarse el tiempo suficiente respecto al por qué se necesita este componente y cómo beneficiará a quienes lo reciban. Aún cuando pueda ser complejo de determinar, una experiencia de eLearning debería iniciar con los resultados del estudiante.

Las competencias tratadas deben ser un punto de partida para los desarrolladores de eLearning como una manera de determinar si el producto de aprendizaje será de beneficio para los usuarios y si cubrirá sus necesidades. Antes de enfocarse en el contenido o la estética de la experiencia, los diseñadores necesitan preguntarse: “¿Por qué los estudiantes necesitan esto?, ¿cómo los beneficiará?”.

Esto necesita reflexión constante a lo largo del proceso de diseño. Dice Mark: “Si usted reflexiona y revisa todo su proceso, definitivamente va a obtener un producto más útil porque usted decide cómo (puede) mejorar este producto o cómo (puede usted) cubrir mejor las necesidades del estudiante”. Los profesionales en aprendizaje y desarrollo tienen la tarea de crear experiencias que llenen los vacíos en el conocimiento y creen individuos más educados. Para cumplir con esto, los diseñadores deben considerar las necesidades de sus estudiantes. Las metas organizacionales son importantes, pero cuando los estudiantes no haya valor en sus experiencias de eLearning, posiblemente no obtendrán los resultados de aprendizaje esperados. Cuando esto sucede, la organización no se beneficia de ninguna manera.

2. Hacerlo discreto

Mark dice: “No vamos a crear un curso en línea de ocho horas que deba realizarse de una sola vez. Simplemente no funcionará”. Eso sucede porque el mejor diseño educativo es discreto para el estudiante. Los cursos largos para realizarlos de una sola vez no son efectivos y tampoco darán resultados positivos. En cambio, los diseñadores didácticos deben considerar lo que Mark llama “fragmentar” (chunking). En otras palabras, el aprendizaje se divide en partes más pequeñas y manejables. Esto también se conoce como microaprendizaje.

Esto lo vemos en las sesiones presenciales de desarrollo profesional. La gente puede sentarse y quedarse en un sitio sólo por un breve tiempo antes de que necesite levantarse y moverse. Por eso es que se hacen recesos o sesiones grupales pequeñas durante los eventos de aprendizaje en vivo. Para el eLearning, “fragmentar” puede traducirse en módulos de aprendizaje más pequeños o cursos de microaprendizaje. Los estudiantes valoran poder completar una tarea en un tiempo corto, también se puede incrementar la confianza y motivar a los estudiantes para continuar su progreso con la experiencia eLearning.

Del mismo modo, se enfatiza en “darle un respiro” al estudiante, como le dice Mark. Debe haber un espacio para que los estudiantes sean participantes activos en el proceso. Darles un medio para que hagan preguntas o expresen sus ideas durante el desarrollo de las actividades, lo que ayudará a evitar la sobrecarga cognitiva. Los diseñadores pueden prevenir que los estudiantes se sientan bombardeados o abrumados por la experiencia poniéndose en sus zapatos desde el inicio del proceso de diseño.

3. Diseñar más con menos

Hay un valor en la simplicidad que puede pasarse por alto durante el proceso de diseño. Quizás sea tentador querer “poner adornos”, como dice Mark, que no son realmente necesarios para que el usuario final adquiera nuevos conocimientos. Mantener el diseño de la experiencia de aprendizaje lo más sencillo e intuitivo posible ayudará a reducir la frustración de los estudiantes y les dará una experiencia más significativa. Durante una experiencia de eLearning, todo lo que el usuario vea en la pantalla debe ser estéticamente agradable, y más importante aún, tener un propósito de utilidad.

Un diseño más simple también se traduce en que puede ser potencialmente transformado y reimaginado con facilidad a medida que mejora la tecnología y el mundo sigue cambiando. Mark dice que un buen diseño también es sostenible. A menos que el contenido se vuelva obsoleto, la experiencia de aprendizaje debe ser duradera en la medida que pueda adaptarse a las nuevas tecnologías.

Hoy en día las personas se involucran con las tecnologías de enseñanza y diseño más que nunca, y en palabras de Mark, “esto le da un verdadero impulso a toda (la) industria actualmente”. A pesar de los constantes cambios en el mundo, los diseñadores didácticos y educativos aún pueden crear experiencias eLearning significativas y duraderas.