Cinco formas en que la IA está cambiando las finanzas
La inteligencia artificial logran estos avances
Las herramientas de inteligencia artificial están listas para superar las capacidades humanas en cinco disciplinas financieras clave, según una investigación encargada por SAP Insights.
La investigación examinó los procesos comerciales típicos empleados por la función financiera e identificó las áreas en las que la IA está transformando el trabajo en mayor medida: contabilidad, gestión de datos, planificación y estrategia, control y análisis.
Las herramientas de IA logran estos avances en gran medida automatizando procesos y aumentando la eficiencia. Por ejemplo, las herramientas de IA pueden analizar rápidamente grandes volúmenes de datos y detectar discrepancias en esos datos con mayor rapidez que los humanos. Pueden identificar tendencias y hacer pronósticos, y pueden automatizar los procesos de presupuestación con análisis predictivos.
Por ahora, otras áreas se ven menos afectadas, como el pensamiento crítico y la ética, la comunicación eficaz, la resolución de problemas y la construcción de conocimientos y aprendizaje en el ámbito de la inteligencia artificial. Las herramientas de IA carecen de razonamiento ético (por ahora), así como de intuición y habilidades creativas. Esto limita su capacidad para resolver problemas complejos, pero aún pueden ofrecer un mejor apoyo para la toma de decisiones.
La investigación revela dónde aún se necesitan habilidades humanas. También muestra áreas en las que las herramientas de IA eventualmente asumirán tareas que las personas realizan actualmente, como mejorar la gestión de inversiones y la valoración de activos al administrar capital. La IA creará nuevos requisitos o tareas, así como también cambiará el enfoque del trabajo financiero.
Un análisis más detallado de cada una de las cinco disciplinas que enfrentan los mayores cambios muestra algunas fortalezas y debilidades comunes de la IA, pero también muestra algunos rasgos únicos.
1: Contabilidad: Automatizar transacciones, mejorar el flujo de caja
Las herramientas de inteligencia artificial superan a los humanos en materia de contabilidad al automatizar los procesos transaccionales, lo que aumenta la eficiencia, reduce los errores y procesa las transacciones con mayor rapidez. Pueden realizar un seguimiento continuo de las transacciones, lo que garantiza una gestión precisa del flujo de caja, y pueden realizar la contabilidad fiscal con una intervención humana mínima, lo que permite el cumplimiento y la presentación de informes fiscales en tiempo real.
Los sistemas de IA generan nuevos requisitos para su implementación, mantenimiento y control, pero el trabajo humano se está centrando en la estrategia y el cumplimiento normativo en lugar de en el registro de transacciones. La introducción de datos es cada vez menos necesaria. Se necesitan habilidades humanas para supervisar el cumplimiento normativo, tomar decisiones éticas y llevar a cabo una gestión financiera estratégica.
2: Habilidades de gestión de datos: Velocidad y precisión
De manera similar, la velocidad y precisión de procesamiento superiores significan que las herramientas de IA están revolucionando la gestión de datos. Estas herramientas permiten la recuperación y el procesamiento de datos en tiempo real y, al igual que en la contabilidad, reducen en gran medida la necesidad de ingresar datos manualmente.
Sin embargo, la interpretación de los datos, especialmente para fundamentar la estrategia empresarial, sigue estando mejor a cargo de las personas. Las capacidades de la IA generarán nuevos requisitos para el desarrollo y la gestión de sistemas de gestión de datos de IA. Mientras tanto, las personas deberán aplicar más habilidades de supervisión, análisis y toma de decisiones de datos en sus funciones.
3: Planificación y estrategia: Mejor previsión
Las capacidades superiores de procesamiento de datos de las herramientas de IA implican que pueden identificar tendencias y realizar mejores pronósticos, prediciendo eventos futuros con mayor precisión, aunque solo en relación con datos cuantitativos. Pueden integrar varias fuentes de datos para una gestión de riesgos más integral y pueden automatizar los procesos de presupuestación mediante análisis predictivos.
Sin embargo, las personas siguen siendo mejores en el pensamiento estratégico, y la intuición y la experiencia siguen siendo importantes. Además, los humanos deben crear los insumos y definir los parámetros para el modelado de escenarios y la formulación de estrategias. Por lo tanto, las responsabilidades de los humanos se centrarán más en la interpretación de los pronósticos generados por la IA y se orientarán hacia la formulación de respuestas estratégicas.
4: Control: Encontrar las discrepancias
¿Cuál de estas cosas no coincide con las demás? Las herramientas de IA pueden detectar discrepancias en los datos mucho más rápido que los humanos y, luego, pueden sugerir soluciones. Pueden crear presupuestos precisos y realistas. Y pueden realizar un seguimiento en tiempo real, controlar los parámetros e identificar las desviaciones del plan.
Los humanos seguirán necesitando realizar análisis más avanzados para interpretar los hallazgos generados por la IA y luego tomar medidas correctivas en función de esos hallazgos. No tendrán que supervisar los saldos de las cuentas y los libros contables de la empresa, pero sí deberán supervisar los sistemas de IA. En otras palabras, la supervisión humana seguirá siendo crucial.
5: Análisis: perspectivas y modelado
Las herramientas de inteligencia artificial destacan por su capacidad para sintetizar y analizar rápidamente grandes volúmenes de datos. Pueden ofrecer información a través de técnicas avanzadas de modelado de datos y respaldar la toma de decisiones con recomendaciones basadas en datos.
El trabajo humano está evolucionando hacia la evaluación crítica de las recomendaciones elaboradas por la IA, como la verificación de datos. Y serán las personas, no las herramientas de IA, las que tendrán que desarrollar conocimientos e implementar esas recomendaciones. A medida que la tecnología se haga más poderosa, el entrenamiento y el desarrollo de modelos de IA también cobrarán mayor importancia para los humanos.
La IA tocará todas las disciplinas financieras
Las herramientas de inteligencia artificial están incursionando en todas las áreas de las finanzas, pero están modificando los roles y las responsabilidades de los humanos, no reemplazándolos. Las capacidades de automatización de estas herramientas reducen la necesidad de tareas como la entrada de datos y la generación de informes, pero el uso de la IA también crea nuevas tareas, como la supervisión y el análisis de todos esos datos de IA, para las cuales los humanos necesitamos aplicar nuestras habilidades superiores de pensamiento crítico y estratégico.
Por ahora, las herramientas de IA están muy lejos de alcanzar las capacidades de los humanos en algunas áreas. No pueden realizar razonamientos éticos. Pueden realizar análisis fácticos, pero no pueden distinguir entre lo correcto y lo incorrecto. Pueden manejar comunicaciones rutinarias, pero no complejas o estratégicas. Carecen de empatía e intuición, lo que limita su capacidad para interactuar con las personas (como los clientes).
Figura 1: Grados de cambio impulsados por la IA
La inteligencia artificial está transformando las finanzas, pero está modificando el trabajo humano en cada área en diferente medida.
Eso no significa que la IA no tenga un papel en disciplinas que requieren criterio humano, aunque en el futuro previsible, los empleos en esas áreas seguirán siendo similares a los de hoy. La IA puede automatizar tareas rutinarias, mejorar la velocidad y la precisión y brindar apoyo analítico para resolver problemas de manera eficaz.
En última instancia, la combinación de IA y habilidades humanas evolucionadas puede ayudar a las empresas que las adopten a tomar decisiones comerciales más rápidas y mejor informadas en todas las áreas de las finanzas.