Cada día vemos cómo crece el reto de las instituciones financieras para aprovechar la IA y proporcionar nuevas dimensiones a sus canales de productos y servicios existentes para ofrecer capacidades de servicio las 24 horas.
En principio, el objetivo es atraer a las nuevas generaciones, pero en realidad lo que requieren es aumentar el retorno de las inversiones mediante la reducción de los costos operativos y por supuesto fomentar la transformación digital y la automatización. De allí vemos cómo los bots, considerados el eslabón perdido para los proveedores de servicios financieros en la era digital, están proliferando al punto de que se proyecta que el ahorro de costos operativos por el uso de chatbots en la banca podría llegar a $7.3 mil millones a nivel mundial para 2023, según un nuevo estudio de Juniper Research.
De esta forma, las instituciones financieras están buscando desarrollos de chatbots para manejar las tareas bancarias de manera más fluida, automatizando las preguntas repetitivas que consumen mucho tiempo y tiene un gran impacto en el desempeño, la calidad de servicio y así simplificar la experiencia bancaria general para los clientes. En el proceso de acelerar el uso de chatbots, no en todos los casos se han desarrollados experiencias únicas, sino que más bien han desencantado a los clientes y nos están dando un mensaje claro:
La conveniencia digital no se puede cortar y pegar y si se utilizan las plataformas de IA conversacional, las experiencias podrían convertirse en el camino hacia el éxito.